Mi primer shooter de "pley"! XDD y qué gran shooter.
Una compra de la que no me arrepiento, con el precio que tienen los juegos en PS3 como para arrepentirse, porque anda que no tiene que doler comprar un juego y que se te quede la sensación de que no lo vale y encima sean casi 70€, pero, por suerte, ese no es el caso de este juego.
Resistance 2 es ante todo un shooter de ir de un punto a otro. Vamos, que olvidaos de la libertad de otros juegos, algo que no entiendo que algunos valoren como negativo, pues es como ver una película bélica y quejarse de que hay tiros, o quejarse de que el último Mario Bros no es realista. Son videojuegos, arte interactivo de entretenimiento, ni más, ni menos. Qué bonita me ha quedado la frase.
El juego para un sólo jugador tiene una campaña muy bien hecha y desarrollada de principio a fin. No tiene unas largas secuencias no interactivas como en Metal Gear Solid 4 (eso fue pasarse Kojima) pero las suficientes para ponerte en situación y demostrar que el juego sí que tenía su guión, con una historia a la que aún le quedan secretos. Serán mamones, cómo se guardan artillería para un tercer Resistance.
Como esto no es una revista de videojuegos, ni me pagan por hacer este artículo, ni nada, y no es un análisis, pues no me voy a poner a hacer la típica disección sobre gráficos, sonido, mecánica de juego, etc, que es buena, os voy a contar la que para mí ha sido la experiencia más interesante de todo el juego, la cual gratamente se produce varias veces en el juego. En esta tiene especial relevancia un tipo de enemigo en concreto, los
camaleones. Son unas bestias que atacan cuerpo a cuerpo, que son invisibles y hacen un ruido característico cuando están en la zona, como un Depredador (Predator para los anglo-parlantes). Sólo son visibles en el momento que realizan su mortal ataque, así que estás bestias hijas de mala madre, aunque a lo mejor su madre era muy simpática y ellas sencillamente han tenido una infancia muy dura con esto de la guerra Quimera vs Humanos, de un solo golpe te matan. Sí, te matan, estás jugando tan tranquilo, te depistas y un camaleón te ha matado. Así de sencillo, así de claro. Pero esto en vez de ser algo malo, es muy divertido, porque es debido a este efecto tan devastador que cada vez que oyes su ulular, te empiece a subir el stress. Pueden atacarte por cualquier lado, delante, detrás, izquierda, derecha, y puede que para cuando los veas sea demasiado tarde. Así que el pulso se te va acelerando, alcanzando cotas insospechadas cuando oyes las fuertes pisadas (que hacen temblar la pantalla) que anuncian el inmininente zarpazo. En ese momento sólo tus rápidos reflejos (y un buen disparo de escopeta) te van a librar de la muerte.
Pienso que el juego está fantásticamente rematado y tiene un final, que no voy a decir, pero sinceramente soberbio. La historia de Nathan Hale funciona.
El multijugador no lo he jugado mucho pero me ha gustado, aunque aun tengo pendiente probar los tiros supermultitudinarios en las partidas de 60 jugadores.
Podéis buscar más
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