Ayer estuve viendo la película documental de Michael Moore, Farenheit 9/11. Como es habitual nos cuenta cosas que parecen tan obvias que es increíble que ocurran, con ese toque de humor retrata lo que pasó explicando los puntos más escabrosos. Me gusta, aunque en pequeñas dosis, porque lo encuentro un poco cargante, pero ayer me vi enterita la película y me gustó. Hablaba de todo un poco, desmarañando la red de influencias de cosas que pasaron delante de nuestros ojos y por las cuales a Bush no se le ha caído el pelo, pero yo quería comentar solo una cosa del documental que se me ha quedado gravado, los soldados.
Se ven diversas entrevistas a varios soldados en distintas situaciones que reflejan su actitud en contra de su presencia en Irak, la imagen del soldado contestando que no iría de nuevo a Irak aún a riesgo de cárcel es bastante significativa, y Moore borda esta parte al describir quienes son los soldados. La mayoría pertenecen a clases bajas, de zonas deprimidas, donde el ejército representa una buena salida, y refleja ese contraste al preguntar a los senadores si ellos enviarían a sus hijos a Irak, la respuesta es obvia, no? Nadie suele querer mandar a sus hijos a la guerra, pero si no hay más remedio, por necesidad, pues se mandan. Los soldados son los que luchan por nosotros, por defender nuestro país, pero más que nada por defender el sistema del que ellos son producto "y lo único que piden es que cuando se les envíe sea por un buen motivo".
Un buen motivo, eso es lo que falló con esta guerra. Como decían en alguna película, no hay nada noble en la guerra, pero si hay que hacerla se hace, eso sí, con un motivo que la justifique de verdad. Si es que Jorge Bush llevaba pensando en Irak antes incluso de ser elegido presidente. Lamentable.
T - 8h 30min ('T' menos ocho horas y treinta minutos)
jueves, septiembre 08, 2005
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1 comentario:
Yo sólo justificaría una Guerra si es por motivos de Defensa... única y exclusivamente por motivos de defensa.
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