He comentado muchas veces la mala memoria que tengo... y bueno... tan mala no es. A ver, es muy mala para los nombres, las caras, las fechas y cosas así, pero sí que no es nada mala para los recuerdos, solo algunos, eso sí, mi memoria es bastante caprichosa.
Hay cosas que recuerdo con tal nitidez que consiguen evocar en mí todo ese momento pasado; La primera vez que mis labios tocaron los de otra chica. La primera vez que tuve un flechazo. La segunda. Días en la playa en la barrosa. Juegos de niño. Días de fútbol. Un partido de baloncesto. La primera vez que besé a la persona que más anhelaba. Una fiesta. Una boda. Otra boda. Una noche maravillosa. Un paseo bajo la lluvia. Una tarde en el cine con una chica encantadora...
Ya estoy melancólico, pero es que tengo recuerdos que para mí son tan bonitos, que no puedo evitar sumergirme en ellos cuando cruzan mis pensamientos. Tengo suerte, no se me olvida nunca lo bueno que he vivido, pero a veces, y últimamente demasiado, no solo me dibujan una sonrisa, sino que a la alegría que me dan le sucede una gran nostalgia. Desearía volver a ese instante y vivirlo entero de nuevo. Quién no querría repetir.
Mi corazón, al contemplar todo lo que ha vivido, con lágrimas, se impacienta por sentir nuevamente la calidez de algo tan hermoso.
miércoles, agosto 16, 2006
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2 comentarios:
que bonitos los recuerdos, tienes la confianza de que saldra todo bien... mejor ve a construir nuevos, siempre se siente mejor vivir que recordar...
casi nunca comento, pero siempre estoy al pendiente...
un saludo!!!
Estoy totalmente de acuerdo, aunque es muy bonito recordar, y muchas veces te de un subidon de alegría, lo mejor es que esas sensaciones sean las que estes viviendo en cada momento.
Espero que lo del buceo haya estado bien. Un besazo peque:
Pauchan
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