Dicen que todo lo bueno se acaba, y en algún momento las vacaciones han de terminar y volver trabajar. De todas formas, casi que desde que empezó la jornada intensiva me siento de vacaciones. Tras meses volcado al 120% con el trabajo se acumulaba el cansancio pero este verano, no hemos parado, y lo hemos conseguido, desconexión 100%, hagamos recuento:
-Maese y yo seguimos buceando, y hemos salido todas las veces que ha sido posible y encima ya somos B2E. En proyecto está el buceo en Almería. Qué ganas tengo de ir allí. Aguas cristalinas!
-Hemos hecho incontables escapadas a muy diferentes playas. Diox, que hasta estoy moreno. Distintos lugares, distintos días, todos ellos, una maravilla.
-He salido a patinar todas las semanas. Sephyrot, a ver si Hestojarto se pone las pilas y puede acompañarnos los martes a las salidas de roller-skating. XDD
-He empezado a ir al gimnasio con Maese, y en menos de 2 meses ya se notan resultados :-D.
-La visita a la familia en la playa no podía faltar. Dos cumpleaños de sendos tíos celebrados a lo grande. La gran nadada a la boya de la playa, con un máximo histórico de participación familiar, y de la cual tengo fotos. (viva la cámara con carcasa subacuática).
-Una semana sólo en casa, con barbacoas incluidas. Buenísima la del pasado sábado. No veía tanta gente en mi casa a la vez, desde, buff, desde el año pasado, que también fue una gran barbacoa.
-Volvemos a tocar la guitarra. Espero organizarlo para este año tomar clases. StringKiller cuento contigo. ^^
-Y por supuesto enganchado a Star Trek Voyager y Death Note.
Un sin parar en el que pensaba que recogería el cuarto, pero no, sigue tanto o más caótico que cuando empezamos a tener tiempo libre. Su estado natural, vamos.
Bueno, esta semana tocará un poco de síndrome postvacacional, o no, porque la reentrada va a ser heavy y dudo que haya tiempo para la añoranza.
domingo, agosto 26, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario